Nombre de lance torero;
el paño como un capote
con la faz del Nazareno.
Qué ternura
la de tus ojos morenos
al ver el dolor que pasa
bajo el peso del madero.
Las blancas manos al aire
y tu corazón latiendo:
piedad de sangre inocente
en un mediodía negro.
Sudor y sangre divinos
van rompiendo
como un torrente de angustias
en tu inmaculado lienzo,
y hay un fondo de amarguras
flotando en el azul terso...
El aire que no se mueva
en este instante supremo,
mientras ángeles pintores,
desde su estudio del cielo,
copian en tu paño blnaco
los rasgos del Dios eterno.
Alejandro Martínez Ramón.
Pregón de Semana Santa 1990.
Foto: José Rafael Navarro
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